El grafeno, "el próximo material milagroso
Elgrafeno se conoce a menudo como el "próximo material milagroso". Su potencial es tan maravilloso que sus pioneros recibieron el Premio Nobel en 2010. Los años del silicio pueden estar contados, ya que el grafeno podría cambiar radicalmente el futuro de la electrónica. Piense en una olla capaz de detectar la presencia de la bacteria E. coli, o en un teléfono móvil tan flexible y fino como un trozo de papel. Todas estas aplicaciones podrían hacerse realidad si el material milagroso, conocido como grafeno, hace honor a su nombre.
El grafeno es un cristal bidimensional de sólo un átomo de grosor. Los carbonos se forman en un panal hexagonal con una distribución perfecta: sólo 0,3 nanómetros de grosor, con apenas 0,1 nanómetros entre cada átomo. Conduce la electricidad mejor que el cobre, el material más fino conocido, más flexible que el caucho, más fuerte que el acero ¡e incluso que el diamante!
Muchas de las aplicaciones propuestas para el grafeno son la electrónica y la informática. Podría utilizarse en transistores para circuitos eléctricos de alta velocidad y podría funcionar mejor que el silicio en los microchips. Al mismo tiempo, una investigación realizada en China descubrió que la propiedad antibacteriana del grafeno es eficaz para eliminar la bacteria E Coli, lo que da esperanzas de que también pueda utilizarse en productos de higiene. Además, al ser bidimensional, podría utilizarse para detectar una sola molécula de gas: si una molécula de gas se adhiriera a una lámina de grafeno, la resistencia eléctrica cambiaría. También podría utilizarse como detector de microbios.
Sin embargo, hay algunos problemas asociados al grafeno que impiden su comercialización. En la actualidad, no existe un método de síntesis general preciso para la producción masiva de grafeno. Hasta que esto no se supere, el grafeno no estará disponible en el mercado de masas. También hay incertidumbres sobre las propiedades eléctricas del grafeno, por lo que es necesario seguir investigando para aclararlas. Sin embargo, si se superan estos problemas, el grafeno revolucionará la electrónica, la ingeniería civil y la medicina en las próximas décadas.