Aplicaciones del hafnio
El hafnio pertenece al grupo 4 de la tabla periódica, junto con el Ti y el Zr. Tiene un número atómico de 72 y una masa atómica de 178.
Las propiedades geoquímicas del Hf y el Zr son muy similares, ya que el radio iónico del Hf (71 pm) es casi idéntico al del Zr (72 pm). Todos los minerales de Zr contienen Hf y no suelen conocerse minerales puros de Hf.
En general, las rocas ígneas y metamórficas contienen cantidades muy pequeñas de Hf. El hafnio puede utilizarse como indicador de la mineralización de Zr. Valores elevados de Hf indican la presencia de rocas félsicas, especialmente masas intrusivas. La naturaleza resistente de los minerales de Hf limita la concentración de Hf en el agua natural. El hafnio suele estar presente en el agua natural en concentraciones inferiores a 0,1 µg l-1.
Las aguas residuales son la principal fuente antropogénica de Hf. El hafnio se utiliza en la producción de filamentos de bombillas eléctricas, tubos catódicos de rayos X, barras de control de reactores, como aleación con Ti, Nb, Ta y Fe, y en la industria cerámica. Varias investigaciones realizadas en los años 60 y 70 demostraron que las concentraciones de Hf no eran elevadas en zonas de actividad industrial, y parece que las fuentes geológicas de Hf son más importantes que las antropogénicas.
El hafnio no tiene ninguna función biológica conocida. Se dispone de muy poca información sobre su toxicidad, pero en general se considera de baja toxicidad. No se han notificado efectos negativos sobre el medio ambiente. No obstante, dado que no se dispone de datos suficientes sobre el efecto del Hf en la salud humana, debe considerarse potencialmente tóxico.